Los instrumentos para medir la temperatura son cruciales en la industria de nuestro país, ya que permiten tomar decisiones relevantes y optimizar cada proceso productivo, ya sea en plantas o en laboratorios. Por tal motivo, tener el respaldo de un especialista en la calibración de termómetros y que proporcione un certificado por cada instrumento es algo que no pueden omitir.
Contar con el certificado de calibración de cada instrumento es lo más conveniente durante las auditorías de calidad. Comúnmente, los auditores esperan obtener toda información amplia y relevante para determinar si una empresa tiene o no la calidad suficiente para realizar operaciones en un sector en particular. Pueden garantizar operaciones adecuadas y tener todo en orden si llevan sus termómetros a un laboratorio de metrología.
Ahora bien, este último tiene que estar acreditado por la Entidad Mexicana de Acreditación o EMA por sus siglas. Si bien hay otras instituciones que brindan la acreditación, en nuestro país, la EMA es la más conocida, debido a su larga historia y la confianza que produjo y produce entre las industrias del país. Si llevarán por primera vez sus termómetros con laboratorios de calibración acreditados, deben considerar antes cinco puntos clave para un proceso informado y exitoso.
Definición
La calibración de termómetros es un proceso complejo y sofisticado que, usualmente, realizan ingenieros especializados en metrología de temperatura. Para que puedan proporcionar sus servicios, deben tener instalaciones con entornos controlados, además un “instrumento patrón” que sea más preciso que el equipo a calibrar. Posteriormente, se aplican varias pruebas especiales y se corrobora la semejanza en las mediciones del patrón y el instrumento a prueba.
Importancia de la calibración de termómetros
Cada instrumento de medición de temperatura debe calibrarse, ya que es crucial conocer el error de medición que posee. Al no contar con certeza sobre este factor, pueden ocurrir pérdidas notables para su negocio y problemas con las autoridades. Durante el proceso de calibración, se realizan varias pruebas, donde los instrumentos son llevados casi hasta su máximo límite de lectura, es decir, por arriba y por debajo de 0°C.
Una vez que culminan las pruebas, el personal del laboratorio emite y proporciona un certificado de calibración, que incluye información importante capaz de facilitar y mejorar la toma de decisiones de cualquier proceso productivo. Sepan que el proceso varía según el tipo de termómetro. Actualmente, hay muchos tipos de estos instrumentos, por lo que no todos se calibran de forma similar. Por tal motivo, es importante visitar un laboratorio acreditado por la EMA que sea confiable y conozca los procesos adecuados para cada termómetro.
Uso del certificado de calibración
Los certificados de calibración consisten en documentos que incluyen el aspecto más importante en cualquier termómetro o instrumento: el error de medida. Contar con este valor ayudará a los usuarios a determinar si es funcional o no para una aplicación específica, además, permitirá saber si algún objeto o cuerpo está en la temperatura correcta, lo que podrá saberse al medir las lecturas arrojadas por el termómetro y el grado de error expuesto en el certificado.
Existen empresas que omiten el servicio de calibración de termómetros, ya que consideran que adquirir constantemente nuevos instrumentos garantizará la correcta medición de estos. Se trata de una creencia equivocada, ya que los ejemplares recién adquiridos también pueden fallar. Sepan también que el encendido correcto del equipo tampoco quiere decir que funcione eficientemente. Lo preferible es respaldarse en un experto y cumplir con las calibraciones periódicas.
Periodo de calibración.
Si bien fijar un periodo no es una obligación del laboratorio de metrología, deben considerar que su instrumento, cada que es usado, suele presentar una deriva, conocida también como «envejecimiento». Además, utilizar constantemente el termómetro maximiza el error de medida. Incluso, este último puede aumentar si el instrumento no es usado.
Los periodos de calibración deben ser estipulados de manera objetiva por los usuarios que usan el instrumento y, en gran medida, conocen los riesgos de medir errores considerables en entornos productivos. Pueden realizarse algunas estimaciones con ayuda de expertos. Por ejemplo, si el instrumento a calibrar pertenece a una empresa farmacéutica, debe llevarse al laboratorio dos o tres veces al año como mínimo.
Disponer de un termómetro calibrado en tal industria o en otras, como la alimentaria, es indispensable, no obstante, esto no significa que, si cuentan con un ejemplar para medir la temperatura de un chocolate o el proceso de preparación de caramelos sea igual de estricto. Existen puntos críticos que solo el encargado del control de calidad de tal entorno debe cuestionarse.
Si están por llevar sus termómetros para que reciban el servicio de calibración de instrumentos, contacten a los expertos de Masstech. Estamos acreditados por la EMA y tenemos amplia experiencia en la calibración de instrumentos de lectura directa. Si desean más información, comuníquense al (55) 5359 3671, (55) 5357 1943, (55) 5359 5356, (55) 5576 7356, (55) 5359 4981, (55) 5358 5653 o llenen el formulario.